Todos hemos oído hablar del feng shui. Aunque puede que algunos busquen esas palabras en la carta de un restaurante chino esperando un extraño plato oriental, la mayoría saben que se trata de un estilo de decoración destinado a atraer el bienestar, las buenas energías y el descanso. Suena bien, ¿verdad? El feng shui nació en China como una forma de conocimiento que estudiaba los movimientos y cambios de los astros, el clima y la naturaleza. La estética llegó a ser tan importante que, durante el imperio chino (que duró más de mil años) llegó a ser un asunto de estado, y tan solo las construcciones más importantes podrían tener acceso a este estilo. Hoy por hoy el tiempo ha cambiado y, por suerte, todo el mundo tiene acceso a la decoración feng shui.
Ordenar y limpiar
Se supone que durante el proceso de transformación de tu vivienda no solo debes ordenar y limpiar el interior de la misma, sino también tu propio interior, descubriendo cosas sobre ti mismo. Para ello, una de las máximas del feng shui es la amplitud y la luminosidad. En general, abandonar los ambientes cargados y oscuros para mejorar la vida de los ocupantes del hogar, ¡desde la propia entrada! Los primeros pasos en el hall ya deben ser toda una declaración de intenciones, con un ambiente armonioso y positivo.
Así es: en el feng shui, la luz es absolutamente energizante, vital y única. La luz es vida, siempre que esta sea natural, ya que el feng shui se valora más con los rayos del sol y no con lámparas o bombillas que den luz artificial. Según los expertos, este año la clave estará en el sureste, donde entrará la energía positiva y la fortuna, por lo que la ventana debe permanecer abierta tanto tiempo como sea necesario. Claro, ¡sin congelarse por el camino!
Los muebles del feng shui
Los materiales clave del feng shui son la madera y el metal. La madera traerá de vuelta la naturaleza, lo real, lo vivo, el chi de tu hogar. Para que el ambiente no se vaya a lo rural, se puede combinar con otros electrodomésticos de acero, para obtener un equilibrio que parezca natural y ofrezca una profunda tranquilidad. En cuanto a la forma, se abraza la curva, evitando los cantos pronunciados que pueden causar cierto malestar. La curva invita a la conversación y a la comunicación, y a estar más en consonancia con nuestro chi y lo que nos rodea. Compruébalo en nuestros muebles de salón en Alcalá de Henares.
De la misma manera, los colores no deben ser fuertes o exagerados, con fuerte contraste: el feng shui debe invitar a la reflexión, la tranquilidad y el descanso mediante colores sutiles, que ayuden a relajarse, sentarse junto a la ventana y, simplemente, relajarse. Otros elementos como velas, plantas o agua (si tienes la posibilidad de, en tu jardín, tener una pequeña cascada) son también puntos clave de este tipo de decoración.
Si tienes cualquier duda sobre el estilo feng shui o cualquier otro, no lo dudes y consúltanos en nuestra tienda de muebles en Alcalá de Henares: seremos capaces de asesorarte.